Más allá del Rails Way
Más allá del “Rails way”
Hace un par de años estuve presentando una plática llamada “Más allá del ‘Rails Way’” con grupos locales de desarrollo.
En la plática toco algunos temas que tienen relación a qué pasa cuando una aplicación de Rails ya ha crecido a cierto tamaño y qué podemos hacer para tratar de mantenerla en control.
No soy el único que habla sobre estos temas, por ejemplo Ryan Bigg trata el mismo tema en su libro “Exploding Rails” solamente que el acercamiento de él es bastante radical y a mi punto de vista funcionaría en aplicaciones nuevas o “Greenfield” pero desafortunadamente desecha todo el conocimiento que hay sobre Rails.
David Bryant Copeland tiene su libro “Sustainable Web Development with Rails” donde habla de su experiencia de como mantener en forma una aplicación de Rails que ha estado creciendo desde diferentes aspectos de la misma.
Mi plática está más alineada con las ideas de David Bryant Copeland y el alcance es más específico a ciertas áreas que en lo personal encuentro problemáticas y que describo a continuación.
Fat Controllers, obese Models
Esta ha sido una discusión desde hace mucho tiempo en el desarrollo de Rails. Es el primer problema que de identifica en el código de una aplicación de Rails con algunos años en desarrollo y aunque nos damos cuenta casi al inicio sobre esta problemática generalmente por cuestiones prácticas se asume como deuda técnica y se continua adelante.
El problema es que conforme pase el tiempo, sin importar si decidimos por “Fat Controllers” o “Obese Models”, o inclusive ambos; los cambios en ellos se vuelven problemáticos ya que el código es difícil de leer, entender y todavía más complicado de modificar.
Algunas estrategias para lidiar con estas situaciones que se pueden ir introduciendo poco a poco son las que menciono a continuación.
Los modelos a dieta
Podemos ir trabajando con los modelos para liberarlos de la carga de trabajo poco a poco. Ninguna de las estrategias aquí mostradas son un todo a nada.
Scopes
Desde que Rails introdujo “Scopes” en la versión 3 del framework es una de las funcionalidades más utilizadas y también más abusadas en Rails.
scope :active -> { where(status: :active) }
No es raro abrir un modelo de “ActiveRecord” y entrarse con toda una sección de definiciones de “Scopes”, algunas muy simples, otras más complejas pero que generalmente en los controladores para poder ejecutar una consulta se utilizan encadenadas.
scope :active -> { where(status: :active) }
scope :with_orders -> { includes(:orders) }
scope :ordered -> { order(created_at: :desc) }
@products = Product.
active.
with_orders.
ordered.
where(color: :red)
Hay quien dice que hacer esto hace más legible el código, es posible, pero no hace que sea simple de modificar y de mantener.
Desde hace tiempo prefiero hacer uso de “QueryObjects” cuando los “Querys” o “Scopes” se comienzan a poner complejos y más cuando hay condicionales que dicen si se tiene que aplicar o no restricciones.
class ProductQuery
def self.execute(scope: Product, *params)
scope = scope.where(status: :active)
…
end
# more complex logic
end
@products = ProductQuery.execute(
Product, ordered: true, with_orders: true
)
Esta clase encapsula consultas complejas donde ademas podemos aplicar de forma condicional restricciones, uniones, ordenado y cualquier otras operación que se requiera. El resultado sigue siendo un ActiveRecord::Relation el cual podemos seguir modificando fuera del “QueyObject”.
El uso es bastante simple además de que ofrece la oportunidad de que podamos escribir pruebas fuera del contexto del controlador o de los modelos.
Concerns
Los “Concerns” es otra herramienta que se ha utilizado para crear modelos o controladores que son compuestos por módulos reutilizables. Es una manera de mover código hacia módulos específicos para cierta funcionalidad.
class Product < ApplicationRecord
include Flaggable
include Taggable
include Conflictable
include Measurable
include Sanitizable
include Searchable
include Permisionable
end
Product.methods(false).count #=> 161
Los “Concerns” son útiles hasta cierto punto. El problema viene cuando tenemos muchos módulo que agregan funcionalidad, que dependen entre sí, que dependen del orden en que se que carguen y que a final de cuentas nuestro modelo o controlador termina con una cantidad absurda de métodos. Peor aún cuando hay conflictos entre los módulos.
La estrategia para este problema es algo que llamo “Actions”. Consiste en tener pequeñas clases que ejecuten acciones sobre los modelos sin agregar complejidad al modelo tal cual. Por ejemplo, la acción de recibir desde el controlador un campo de texto con etiquetas o “tags” separadas por coma y que el modelo tenga que expandirlas a un “Array” de Postgresql puede se un “Action” que se llamada desde el mismo controlador.
class ProductTagging
def self.tag(product, tags)
…
product
end
# more methods related to tagging
end
@product = ProductTagging.tag(
@product, “landscape, light, reflection”
)
Dentro del controlador las llamadas pueden ser compuestas, es decir, tener llamada a más un “Action” que modifique o haga alguna operación con el modelo. De esta forma un “Action” puede tener pruebas fuera del contexto del controlador o del modelo.
Presenters
Creo que esta estrategia es bastante conocida ya por muchos. Es una forma de eliminar de los modelos código que tiene que ver en como se muestra la información de un modelo en una vista de Rails o en la serialización de un objeto JSON o en el cuerpo de un correo electrónico.
class ProductPresenter < SimpleDelegator
def formatted_price
…
end
end
@presenter = ProductPresenter.new(@product)
<%= @presenter.formatted_price %>
Controladores delgados
El primer paso para lograr esto es aplicar lo que aprendimos al poner a los modelos a dieta. ¿Pero qué pasa cuando la lógica de los controladores es compleja?
Es común que muchos de nuestros controladores iniciaron algo parecido a el siguiente bloque de código.
class ProductsController < ApplicationController
def create
if @product.valid?
return redirect_to :products
end
return render :new
end
end
Pero con el tiempo el controlador se fue complicando inevitablemente. Ahora nuestro controlador tiene cientos de líneas de código que son díficil de comprender o modificar.
class ProductsController < ApplicationController
# Many before_action
# Many helper_method
# Many queries
end
Mi estrategia en estos caso es utilizar “Use Cases”. Sí, leíste bien, “Use Cases”. Es una forma de mover lógica del controlador a clases especialidas para realizar alguna operación compleja en un controlador y que de alguna forma tiene una semenjanza con la deficinición de “Use Cases” funcionales que el Product Manager crea para describir cómo debe funcionar.
class ProductRegistrator
def register(*params)
# complex logic and calculations
…
@product
end
end
En este ejemplo el crear un nuevo producto tiene muchas condiciones y lógica de negocio. Puede hacer uso de “Actions” o “Query Objects” para completar la operación de registrar un producto.
class ProductsController < ApplicationController
def create
product_registrator =
ProductRegistrator.new(product_params)
@product = product_registrator.register
…
end
end
Al remover la lógica compleja el controlador queda nuevamente simple, pero ahora hay una o quizás varias clases especializadas que saben cómo registrar un producto y lo mejor es que es posible utilizar esas clases fuera del contexto del controlador, quizás en un “Background Job”.
Esta estrategia también puede ser útil para refactorizar lógica del controlador donde podamos mantener la lógica original y escribir nueva funcionalidad que podamos activar con una bandera en el sistema.
Hay varias “Gems” o librerías que ofrecen algo similar aquí descrito, por ejemplo estan los “Interactors” ya sea utilizar una de ellas o la solución simple que aquí describo ayuda a desacoplar la lógica funcional de la aplicación del framework de Rails.
Palabras finales
Estos son únicamente algunos consejos simples de como ir moldenado el código de una aplicación grande y compleja. Lo que me gusta en lo personal es que no me obliga a hacer un cambios radical sobre Rails y que me permite ir ajustando poco a poco la aplicación sin tener que entrar en el espiral de reescribir todo.
Al introducir las ideas aquí descritas nos vamos a encontrar con algunos efectos en el código de nuestra aplicación. Primero, vamos a tener más clases pequeñas con funcionalidad específica y que pueden probarse automáticamente sin tener demasiado contexto del framework de Rails.
Segundo, en el caso de los modelos prácticamente eliminamos los “Callbacks” que pueden ser complejos de depurar cuando hay problemas y que son un tanto oscuros y lo mismo puede llegar a pasar con los “Before Action” en los controladores.
Tercero, sí es verdad que vamos a tener más clase, pero van a ser clases pequeñas y que deben de tener una intención clara. Esto nos lleva a expandir la organización de nuestro código.
- app
- models
- controllers
- views
- presenters
- queries
- actions
- use_cases
Lo aquí propuesto en el post son acciones simples que podemos comenzar a incluir en nuestro código, sin embargo, no son las únicas estrategias que podemos utilizar. Hay que tener en cuenta que cualquier estrategia que adoptemos siempre va a tener sus “Pros” y “Cons”.